miércoles, 30 de noviembre de 2011

NO A LA VIOLENCIA DE GENERO

Introducción.

Definición. 

En ocasiones, las distintas denominaciones de los malos tratos lleva a confusión: Violencia de Género, Violencia Doméstica, de pareja, hacia las mujeres, masculina o sexista…
 La violencia doméstica hace referencia a aquella que se produce dentro del hogar, tanto del marido a su esposa, como de la madre a sus hijos, del nieto al abuelo, etc. Excluye aquellas relaciones de pareja en las que no hay convivencia.
La violencia de género tiene que ver con “la violencia que se ejerce hacia las mujeres por el hecho de serlo”, e incluye tanto malos tratos de la pareja, como agresiones físicas o sexuales de extraños, mutilación genital, infanticidios femeninos, etc.

Algunas definiciones:

Todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública o privada (“Artículo 1 de la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Naciones Unidas, 1994).
Susana Velázquez (2003) amplía la definición de violencia de género: Abarca todos los actos mediante los cuales se discrimina, ignora, somete y subordina a las mujeres en los diferentes aspectos de su existencia. Es todo ataque material y simbólico que afecta su libertad, dignidad, seguridad, intimidad e integridad moral y/o física.

Tipos de violencia.

·     Física. La violencia física es aquella que puede ser percibida objetivamente por otros, que más habitualmente deja huellas externas. Se refiere a empujones, mordiscos, patadas, puñetazos, etc, causados con las manos o algún objeto o arma. Es la más visible, y por tanto facilita la toma de conciencia de la víctima, pero también ha supuesto que sea la más comúnmente reconocida social y jurídicamente, en relación fundamentalmente con la violencia psicológica.
·   Psicológica. La violencia psíquica aparece inevitablemente siempre que hay otro tipo de violencia. Supone amenazas, insultos, humillaciones, desprecio hacia la propia mujer, desvalorizando su trabajo, sus opiniones... Implica una manipulación en la que incluso la indiferencia o el silencio provocan en ella sentimientos de culpa e indefensión, incrementando el control y la dominación del agresor sobre la víctima, que es el objetivo último de la violencia de género.
·    Dentro de esta categoría podrían incluirse otros tipos de violencia que llevan aparejado sufrimiento psicológico para la víctima, y utilizan las coacciones, amenazas y manipulaciones para lograr sus fines.
·    Se trataría de la violencia “económica”, en la que el agresor hace lo posible por controlar el acceso de la víctima al dinero, tanto por impedirla trabajar de forma remunerada, como por obligarla a entregarle sus ingresos, haciendo él uso exclusivo de los mismos (llegando en muchos casos a dejar el agresor su empleo y gastar el sueldo de la víctima de forma irresponsable obligando a esta a solicitar ayuda económica a familiares o servicios sociales).
·   También es habitual la violencia “social”, en la que el agresor limita los contactos sociales y familiares de su pareja, aislándola de su entorno y limitando así un apoyo social importantísimo en estos casos.
·     Sexual. “Se ejerce mediante presiones físicas o psíquicas que pretenden imponer una relación sexual no deseada mediante coacción, intimidación o indefensión” (Alberdi y Matas, 2002). Aunque podría incluirse dentro del término de violencia física, se distingue de aquella en que el objeto es la libertad sexual de la mujer, no tanto su integridad física. Hasta no hace mucho, la legislación y los jueces no consideraban este tipo de agresiones como tales, si se producían dentro del matrimonio.

MITOS.

Habitualmente se justifica y se trata de dar explicación a este tipo de violencia atendiendo a:
  • Características personales del agresor (trastorno mental, adicciones), ·  
  • Características de la víctima (masoquismo, o la propia naturaleza de la mujer, que “lo busca, le provoca, es manipuladora…”),
  • Circunstancias externas (estrés laboral, problemas económicos),
  • Los celos (“crimen pasional”),
  • La incapacidad del agresor para controlar sus impulsos, etc.
  • Además existe la creencia generalizada de que estas víctimas y sus agresores son parejas mal avenidas (“siempre estaban peleando y discutiendo”), de bajo nivel sociocultural y económico, inmigrantes… Es decir, diferentes a “nosotros”, por lo que “estamos a salvo”.
Aquellos hombres que son alcohólicos y maltratan a sus mujeres, sin embargo no tienen, en su gran mayoría, problemas o peleas con otros hombres, con su jefe o su casero.  El estrés laboral o de cualquier tipo afecta realmente a mucha gente, hombres y mujeres, y no todos se vuelven violentos con su pareja.
En el fondo, estas justificaciones buscan reducir la responsabilidad y la culpa del agresor, además del compromiso que debería asumir toda la sociedad para prevenir y luchar contra este problema.

CICLO DE LA VIOLENCIA FÍSICA.

Lenore Walker definió el Ciclo de la violencia a partir de su trabajo con mujeres, y actualmente es el modelo más utilizado por las/los profesionales.
El ciclo comienza con una primera fase de Acumulación de la Tensión, en la que la víctima percibe claramente cómo el agresor va volviéndose más susceptible, respondiendo con más agresividad y encontrando motivos de conflicto en cada situación.
La segunda fase supone el Estallido de la Tensión, en la que la violencia finalmente explota, dando lugar a la agresión.
En la tercera fase, denominada de “Luna de Miel” o Arrepentimiento, el agresor pide disculpas a la víctima, le hace regalos y trata de mostrar su arrepentimiento. Esta fase va reduciéndose con el tiempo, siendo cada vez más breve y llegando a desaparecer. Este ciclo, en el que al castigo (agresión) le sigue la expresión de arrepentimiento que mantiene la ilusión del cambio, puede ayudar a explicar la continuidad de la relación por parte de la mujer en los primeros momentos de la misma.
Este ciclo pretende explicar la situación en la que se da violencia física, ya que la violencia psicológica no aparece de manera puntual, sino a lo largo de un proceso que pretende el sometimiento y control de la pareja.

CONSECUENCIAS PSICÓLOGICAS PARA LA MUJER MALTRATADA.

El síndrome de la mujer maltratada, definido por Walker y Dutton se define como una adaptación a la situación aversiva caracterizada por el incremento de la habilidad de la persona para afrontar los estímulos adversos y minimizar el dolor, además de presentar distorsiones cognitivas, como la minimización, negación o disociación; por el cambio en la forma de verse a sí mismas, a los demás y al mundo. También pueden desarrollar los síntomas del trastorno de estrés postraumático, sentimientos depresivos, de rabia,  baja autoestima, culpa y rencor; y suelen presentar problemas somáticos, disfunciones sexuales, conductas adictivas y dificultades en sus relaciones personales.
Enrique Echeburúa  y Paz del Corral equiparan estos efectos al trastorno de estrés postraumático, cuyos síntomas y características, sin duda, aparecen en algunas de estas mujeres: re-experimentación del suceso traumático, evitación de situaciones asociadas al maltrato y aumento de la activación. Estas mujeres tienen dificultades para dormir con pesadillas en las que reviven lo pasado, están continuamente alerta, hipervigilantes, irritables y con problemas de concentración.
Además, el alto nivel de ansiedad genera problemas de salud y alteraciones psicosomáticas, y pueden aparecer problemas depresivos importantes.

Desarrollo del síndrome de la mujer maltratada

Marie-France Hirigoyen  diferencia entre dos fases en las consecuencias, las que se producen en la fase de dominio y a largo plazo.
En la primera fase, la mujer está confusa y desorientada, llegando a renunciar a su propia identidad y atribuyendo al agresor aspectos positivos que la ayudan a negar la realidad. Se encuentran agotadas por la falta de sentido que el agresor impone en su vida, sin poder comprender lo que sucede, solas y aisladas de su entorno familiar y social y en constante tensión ante cualquier respuesta agresiva de su pareja. 
Marie-France Hirigoyen habla de consecuencias a largo plazo refiriéndose a las etapas por las que pasan las víctimas a partir del momento en que se dan cuenta del tipo de relación en la que están inmersas. Durante esta fase, las mujeres pasan un choque inicial en el que se sienten heridas, estafadas y avergonzadas, además de encontrarse apáticas, cansadas y sin interés por nada.

TRATAMIENTO

En muchas ocasiones es necesaria una intervención previa, que la mujer pase por un período de reflexión y quizá varios intentos de salir de esa relación violenta, con ayuda terapéutica o sin ella, hasta que tome la decisión definitiva. A partir de entonces, el apoyo psicológico se centrará en varios aspectos, valorando previamente las necesidades y demandas individuales de cada paciente.
Deberemos evaluar cuáles han sido las secuelas concretas que ha dejado la situación vivida en esa persona, y graduarlas para establecer un orden para el tratamiento.
Algunas de las intervenciones más habituales y básicas para su recuperación serían:
  • Información sobre la violencia de género, causas y origen, mitos, etc.
  • Reducción de la activación y la ansiedad en las formas en que se manifieste (insomnio, agorafobia, crisis de pánico, etc).
  • Fomento de la autonomía, tanto a un nivel puramente psicológico, a través de un cambio de ideas distorsionadas sobre sí misma y el mundo, como a nivel social, económico, etc, orientándola en la búsqueda de empleo, recuperando apoyos sociales y familiares,…

PREVENCIÓN

El principal camino para acabar con la violencia de género es la prevención. Esto incluye, por supuesto, un cambio global en la forma de ver las relaciones entre mujeres y hombres, un cuestionamiento de los roles sociales y estereotipos, del lenguaje, etc. Estos cambios deben partir de las personas adultas con el objetivo de que se transmitan eficazmente a niños y niñas.
Además, tu puedes prevenir y evitar implicarte en una relación que puede llegar a ser violenta:
·    En primer lugar, detectar manipulaciones, aproximaciones no solicitadas, desconfiar de promesas que no tienen sentido en un momento de la relación, tener claro que decir que “no” a algo no es negociable, alejarse cuando esa persona que se te acerca tratando de hacerte ver que tenéis mucho en común o que le debes algo. Para todo esto es muy importante confiar en tu intuición, en las sensaciones de desasosiego que te producen. Cuando conoces a alguien le evalúas igualmente, valoras si esa persona encaja contigo; solo es importante que a partir de ahora incluyas también estos puntos si quieres prevenir encontrarte en una relación violenta. Valora sus ideas sexistas, cómo fueron sus relaciones anteriores (si rompió él o no, cómo habla de ellas…), etc.
·    Además, valora tus propias ideas respecto al amor y la pareja, el papel de la mujer en la misma, a qué se debe renunciar por amor.., etc.
·    Y ante todo, conociéndote a ti misma y teniendo claros tus valores. Si los valores de la otra persona entran en conflicto con los tuyos, debes saber reconocerlo y no aceptar en ningún caso renunciar a aquello que es importante para ti.

viernes, 25 de noviembre de 2011

MARTINA NOS NECESITA - AGUSTINA su hermana la ama



El motivo de la siguiente carta es para contarles cuál es nuestro problema y ver  de qué manera podemos entre todos ayudar a Martina. Mi nombre es Agustina, soy su hermana mayor y quisiera expresar mis más cálidos deseos y un mensaje claro a la hora de contar su historia.

Martina nació con una discapacidad denominada parálisis cerebral severa. Esto fue ocasionado al momento de nacer, en el parto.

Con el tiempo creíamos y pensábamos que caminaría, hablaría, comería sola, respondería a los estímulos exteriores por sus propios medios, entre otras cosas. Pero no fue, ni es así, Martina hoy necesita de una persona que pueda satisfacer sus necesidades básicas nombradas anteriormente, con la ayuda de su familia y amigos hacemos que todos los días pueda integrarse un poquito más a este mundo.

 A penas cumplió sus tres años fue a una escuela especial, donde el amor y la paciencia de las maestras la estimulaban constantemente. Concurrió a natación, estimulación temprana, hizo equino terapia, fonoaudiología, sesiones personalizadas de kinesiología, y caminatas diaria llenas de amor y perseverancia de una mujer que lucha por su progreso constante, una mujer que le habla día y noche esperando esas balbuceo suave que Martina aprendió no hace muchos meses. Esa mujer es su mamá, con una fuerza arrolladora.

 Hoy Martina no camina ni se maneja por sus propios medios, pero nosotros sabemos que no fue,  ni es en vano todo el sacrificio que hacemos por ella y por  mejorar su calidad de vida.

 Hasta no hace mucho, creíamos que no había más tratamientos y cosas por hacer más que darle amor y la propia estimulación de todos nosotros. Pero no es así, se nos presento la oportunidad de realizar un tratamiento en china, con células madre, estas en el cuerpo tienen una función particular en los órganos, tal como el hígado, piel o cerebro. Las células madre son relativamente indiferenciadas y tienen la habilidad de convertirse en

Varios tipos de células para realizar diferentes funciones. Una de las
características más notable de las células madre es su habilidad de reproducir
células completamente nuevas, normales e incluso aun más jóvenes. Como
resultado, las personas pueden usar sus propias células madre o las de otra
persona, o células madre provenientes de tejidos y órganos para remplazar
órganos enfermos o envejecidos. Este procedimiento permite el tratamiento de
una amplia variedad de enfermedades y lesiones.
Es así como nos pusimos en marcha y nos contactamos con el lugar donde se realiza este tratamiento, en el hospital “Bethune International Peace” ubicado en Shijiazhuang, China. Es una puerta que se abre, que no cambiaria a este ser maravilloso que me hace ser la hermana más feliz de la tierra por haberla puesta en mi camino, pero si transformaría su calidad de vida llevándola a satisfacer su necesidades básicas, a poder vivir la vida de otra manera, y poder cambiar así la vida todos las personas que la rodeamos día a día.
 Tengo la certeza que esta lucha y esta fuerza no es en vano.

Abrimos una cuenta en el banco provincia suc.5126
N° Cuenta: 5126/003/528117/2
CBU: 01400441-0351265281172-7

Entre otras cosas, como juntar tapitas y canjearlas, transformando aquello desechable en algo que hoy puede ayudarnos mucho. Consideramos que todos los aportes pequeños y grandes son fruto del esfuerzo y la solidaridad conjunta.

Mi pedido es ver de qué manera podemos difundir aun más esto y ayudar a Martina.

A continuación envió los datos de mi madre que es la responsable de Martina y mis datos para completar aun más la información.
Adjunte en un archivo la carta de certificación del hospital donde se realizara el tratamiento.
DATOS:
Silvia Di Frangia,
D.N.I: 16.890.094, vivimos en la Reja- Partido de Moreno, Provincia de Buenos Aires.
Cel.: 11-564595900
Agustina Posco
D.N.I: 33.905.714
Cel.: 11-51815919
SITIO WEB: http://www.facebook.com/#!/JUNTOSxMARTINA

Muchísimas gracias por su tiempo a quien corresponda, mis más cálidos saludos.


Agustina.

domingo, 20 de noviembre de 2011

VACUNA contra el cancer del Cuello de Utero




Desde este año en la Argentina todas las niñas de 11 años tienen acceso a la vacuna contra el VPH (Virus del Papiloma Humano) para prevenir el cáncer de cuello de útero.


A partir de 2011, la vacuna se incorpora al Calendario Nacional de Vacunación de manera gratuita y obligatoria para todas ellas (tengan o no cobertura de obra social).

Cada niña debe recibir 3 dosis y las 3 son necesarias para que la vacuna sea efectiva. Luego de la primera dosis, la segunda debe aplicarse al mes y la tercera a los seis meses.

Desde el mes de octubre de 2011, la vacuna contra el VPH está disponible en todos los vacunatorios y hospitales públicos del país.

 
LA VACUNA CONTRA EL VPH


¿Para qué sirve la vacuna contra el VPH?
La vacuna contra el VPH permite inmunizar a las niñas contra dos tipos de VPH de alto riesgo oncogénico (los genotipos 16 y 18), responsables del 77% de los casos de cáncer de cuello uterino. Es muy importante la aplicación de las 3 dosis necesarias para que la protección sea realmente efectiva.

¿Quiénes deben vacunarse de acuerdo al nuevo Calendario de Vacunación?
A partir de octubre de 2011, cada año se deben vacunar las niñas que cumplan los 11 años de edad.

¿Cómo es el esquema de administración que requiere la vacuna contra el VPH?
La vacuna se administra con un esquema de 3 dosis para obtener una inmunidad adecuada: la 1ª al momento cero, la 2ª al mes y la 3ª a los seis meses de la primera dosis. Es fundamental completar las 3 dosis para garantizar la efectividad de la vacuna.

¿En qué lugares se realiza la vacunación?
La vacunación se realiza en forma gratuita en todos los vacunatorios y hospitales públicos del país.

¿Por qué se aplica a las niñas de 11 años?
Teniendo en cuenta que en investigaciones realizadas la vacuna demostró mayor eficacia inmunológica al ser aplicada en la preadolescencia, en nuestro país se decidió incorporarla a los 11 años aprovechando la oportunidad de aplicación junto con otras vacunas ya contempladas en el Calendario Nacional de Vacunación para esa misma edad: los refuerzos contra la Hepatitis B y la Triple Viral (contra el sarampión, la rubéola y paperas).
¿Se pueden aplicar la vacuna las niñas de más de 11 años?
La Comisión Nacional de Inmunizaciones recomendó la vacunación para las niñas que hayan cumplido los 11 años, considerándola como la estrategia más adecuada para administrar eficazmente un recurso limitado (como cualquier vacuna de calendario, que se incorpora a una edad determinada).

En el caso de las niñas y mujeres no incluidas en esta estrategia será necesaria la evaluación individual por parte de un profesional médico, quién definirá en cada caso la necesidad de su adquisición y aplicación en el sector privado.

¿La vacuna es segura?
Sí; la vacuna es segura y eficaz si se completan la 3 dosis necesarias (de hecho, ya se distribuyeron más de 15 millones de dosis en el mundo.)
¿Por qué no se vacuna también a los varones?
De acuerdo a información elaborada por la Organización Mundial de la Salud, si se logra una buena cobertura de vacunación en las mujeres también se beneficia a la población masculina, ya que disminuye la circulación del virus en el total de la población. 

¿La vacuna puede tener efectos adversos?
Los efectos adversos son leves y similares a las otras vacunas del Calendario: fiebre, dolor o hinchazón en la zona de aplicación de la vacuna durante las 48 hs. siguientes.

¿Las niñas vacunadas deben realizar los controles ginecológicos en su adultez?
Sí. Aunque hayan sido vacunadas, a partir de los 25 años todas las mujeres deben realizarse periódicamente la prueba del Pap, ya que la vacuna protege contra los 2 genotipos de VPH de alto riesgo oncogénico más frecuentes, cubriendo más del 80% de los causantes de lesiones malignas. Y por lo tanto la realización del Pap permite detectar la presencia de lesiones causadas por genotipos no incluidos en la vacuna.

¿Qué pasa con las niñas mayores de 11 años que no reciben la vacuna?
Al igual que las niñas sí vacunadas, a partir de los 25 años deben realizarse la prueba del Pap, que  continúa siendo un método efectivo  de prevención contra el cáncer de cuello de útero. El Pap es GRATUITO en todos los centros de salud públicos del país.

 
 
¿QUE ES EL VPH?

El Virus del Papiloma Humano (VPH, o HPV en inglés) es una familia de virus que pueden afectar la zona genital-anal de las personas. Existen alrededor de 40 tipos diferentes que pueden dividirse en dos grandes grupos:
    1. Los VPH denominados “de bajo riesgo oncogénico”, que generalmente se asocian a las lesiones benignas, como las verrugas y las lesiones de bajo grado.
    2. Los VPH denominados “de alto riesgo oncogénico”, que son alrededor de 14. Estos tipos de VPH pueden llegar a provocar la alteración de las células generando lesiones precancerosas, que con el tiempo pueden evolucionar y convertirse en un cáncer.
    El tipo de cáncer más común causado por los VPH de alto riesgo oncogénico es el cáncer de cuello uterino. Los demás tipos de cánceres relacionados con el VPH (de pene, de ano) son muy poco frecuentes. Por lo tanto, en el caso de la mujer este virus requiere de un control periódico a través de las muestras de Papanicolau (Pap) para poder detectar si –a causa de una infección persistente por VPH- existen lesiones en la mucosa del cuello del útero que pueden transformarse en precancerosas.

    ¿Cómo se transmite?
    El VPH se transmite por contacto sexual. Es un virus de muy fácil transmisión, y por lo tanto es muy común. Se estima que 4 de cada 5 personas (es decir, el 80%) van a contraer uno o varios de los tipos de VPH en algún momento de sus vidas.

    Es importante saber que el virus puede permanecer "silencioso" o “latente” durante muchos años antes de que se detecte. Esto significa que una persona puede haberse infectado con el virus muchos años antes de ser diagnosticado.

    ¿Los varones también pueden contraer el VPH?
    Sí; los varones contraen el VPH a través del contacto sexual, al igual que las mujeres.

    ¿El VPH produce síntomas?
    La mayoría de las veces la infección por VPH no presenta síntomas evidentes, y el sistema inmunológico se encarga de curarla de manera espontánea sin que la persona infectada se de cuenta.

    En general los VPH de bajo riesgo oncogénico producen verrugas en los genitales o ano: protuberancias o abultamientos que pueden ser de diversos tamaños y suelen tener forma de “coliflor”.  Las  verrugas se pueden tratar, aunque pueden volver a aparecer si el sistema inmunológico de la persona no ha eliminado totalmente el VPH. Los tipos de VPH que provocan verrugas no provocan cáncer.
 
 
 
EL VPH Y EL CÁNCER DE CUELLO DE ÚTERO

¿El VPH en la mujer siempre deriva en cáncer de cuello uterino?
Con controles periódicos y Pap, no existe la posibilidad de desarrollar cáncer de cuello de útero. Únicamente en el caso de que la infección por VPH persista durante muchos años (de 5 a 10 años) sin ningún tipo de tratamiento, los VPH de alto riesgo oncogénico pueden llegar a causar lesiones precancerosas en el cuello del útero de  la mujer, que luego pueden evolucionar en un cáncer.
Por eso es muy importante que a partir de los 25 años todas las mujeres se realicen periódicamente el Pap para poder detectar la presencia de cualquier lesión en el cuello uterino, y tratarla si es necesario.
El Pap es gratuito en todos los centros de salud y hospitales públicos del país.

¿Se puede tratar el VPH?
No; no existe al presente ningún tratamiento que cure el virus. Pero sí existen diferentes tipos de tratamiento para sus manifestaciones, como las verrugas o las lesiones.

¿El preservativo ayuda a prevenir la infección por VPH?
Sí; utilizarlo correctamente ayuda a reducir el riesgo de infección aunque no lo elimina del todo (ya que el virus puede alojarse en puntos de la zona genital-anal que no quedan protegidos por el preservativo).
Aún así, se aconseja siempre el uso del preservativo ya que también permite prevenir otras infecciones de transmisión sexual (como por ejemplo el VIH).

MILI necesita ayuda



Necesitamos ayuda mili tiene 12 años , tiene una paralisis cerebral (hemiparesia) y viajamos a china el 18 de enero ,mili tiene una pagina TODOS JUNTOS POR MILI (FACE) todos los que se quieran sumar y ayudar les vamos estar muy agradecidos.
Datos Bancarios
Banco provincia de bs as caja de ahorro n°511391/1 suc 7169 lujan cbu n°014003420371695113911-1 a nombre de walter mariano suescun - maria paula gadan